DEL DIARIO JUNGE WELT
En una reunión de ministros de Relaciones Exteriores de la OTAN de este viernes, los estados occidentales llegaron a los primeros acuerdos para las próximas conversaciones entre Estados Unidos y Rusia. Los representantes de los gobiernos en Washington y Moscú continuarán sus negociaciones en Ginebra el lunes para desescalar el conflicto de Ucrania, que comenzó después de la videoconferencia de los presidentes Joseph Biden y Vladimir Putin el 7 de diciembre.
Moscú está presionando para obtener garantías contractuales. La OTAN, una alianza para la guerra, debería abstenerse de aceptar nuevos miembros en Europa del Este y del Cáucaso y debería cesar las actividades militares cerca de la frontera rusa. Antes de la reunión de ministros de Relaciones Exteriores de la OTAN, se dijo que era necesario negociar con Moscú sobre desarme y la “transparencia militar”.
Durante la semana continuaron comentarios airados de la Unión Europea, que no participa en los preparativos para las conversaciones de Ginebra. Con la conferencia Biden-Putin, los EEUU, por el lado occidental, asumieron el liderazgo de las negociaciones sobre Ucrania, negociaciones que anteriormente se llevaron a cabo en el “formato de Normandía”. Con ese formato el lado occidental estaba bajo el liderazgo de Alemania, fuerza hegemónica dentro de la UE.
Es cierto que las negociaciones de «Normandía» han progresado poco durante siete años. La canciller Annalena Baerbock (los Verdes) voló a Washington para instar a su homólogo Anthony Blinken para que el gobierno de Biden no «tome una decisión sobre la seguridad en Europa sin considerar a Alemania”.
En un viaje al este de Ucrania, el representante de Asuntos Exteriores de la UE, Josep Borrell, declaró desafiante: «Tendrán que hablar con nosotros», aludiendo a la división de Europa en una esfera de interés occidental y otra oriental a principios de 1945.
En la próxima semana, los ministros de Defensa y Relaciones Exteriores de la UE debatirán cómo la Unión debería lidiar con Washington. Al integrar a la UE sólo a través de la OTAN, Estados Unidos se ha asegurado un liderazgo estricto en el proceso de negociación con Moscú. De una manera similar, con el Pacto AUKUS, traicionaron a Francia en el Pacífico y así cimentaron su liderazgo en la lucha contra China.
En Estados Unidos, mientras tanto, continúa el debate sobre si no es necesario abrir una brecha entre Rusia y China. El Wall Street Journal citó a principios de semana al experto ruso Vasili Kashin. Según este especialista “En su lucha contra la República Popular China, los Estados Unidos no tienen ninguna posibilidad si no concentra todos sus recursos en el Pacífico».
Actualmente, los acuerdos entre Rusia e Irán han hecho que sea «casi imposible» escapar de este dilema letal para Estados Unidos. Ante esta situación los editorialistas del Wall Street Journal recomiendan «moderar la relación con Rusia».
Por otra parte, Washington se ha ganado a sus aliados en Europa para concentrar fuerzas militares en el Pacífico: la fragata alemana «Bavaria» está movilizada en una travesía por el Asia-Pacífico.