ALFREDO JALIFE -RAHME, ACADÉMICO MEXICANO
Países que representan al menos el 30 por ciento de la economía mundial y el 40 por ciento de la población del planeta NO están dispuestos a soportar más un orden unipolar agónico en manos del eje anglosajón.
Los días 15 y 16 de septiembre se celebró en Samarcanda (Uzbekistán) – mítica ciudad, eslabón clave de la antigua Ruta de la Seda – la Cumbre de la Organización de Seguridad de Shanghái (SCO, por sus siglas en inglés): institución internacional fundado en 2001 por China, Rusia y tres países centro asiáticos (Kazajistán, Kirguistán y Tayikistán) a la que luego se integraron con plenos derechos India, Pakistán y Uzbekistán.
El año entrante la cumbre de la SCO se efectuará en India. En ese encuentro la República de Irán se integrará formalmente a la SCO, mientras 10 países desde Bielorrusia hasta Turquía se encuentran en lista de espera.
Putin exhibió orgulloso que la SCO es la mayor organización regional del mundo, mientras el premier indio, Narendra Modi, explicó que sus miembros representan 30 por ciento de la economía global y 40 por ciento de la población mundial. El primer Ministro Indio, también, resaltó con preocupación la urgencia de garantizar la “seguridad alimentaria”
En su discurso Putin alertó: “los intentos para imponer un mundo unipolar han tomado una forma absolutamente monstruosa, que la aplastante mayoría de los países del planeta encuentran inaceptable.(…) hoy Rusia y China se encuentran juntos para construir un Orden multipolar, democrático, justo, basado en la ley internacional y en el papel central de la ONU, y no en reglas que alguien inventó e intenta imponer al resto de las naciones sin siquiera explicar lo que son”.
Putin apoyó la política de una sola China, en referencia al secesionismo de Taiwán inducido por Estados Unidos, y condenó sin rodeos las provocaciones del imperio y sus satélites en el estrecho de Taiwán.
Putin coincidió con China ante la preocupación expresada por el gigante asiático por la operación militar especial en Ucrania. Esta declaración posteriormente ha sido explotada y manipulada engañosamente por el Financial Times y el Wall Street Journal, en medio de una feroz guerra de propaganda que Estados Unidos y la OTAN libran contra Rusia.
Al contrario, después de llamar a Putin, como “mi viejo amigo”, el mandarín Xi aclaró “es un imperativo supremo protegerse contra los intentos de las fuerzas externas que su política es dirigir revoluciones de color. Nosotros debemos oponernos conjuntamente a la interferencia en los asuntos internos de nuestros países, que están siendo ejecutadas bajo cualquier pretexto”.
Xi argumentó que China junto con Rusia, están dispuesto: “ha asumir un rol de potencias responsables que sirva de guía para inyectar estabilidad y energías positivas a un mundo sacudido por turbulencias”.
El periódico Chino Global Times dio particular importancia a la reunión de China, Rusia y Mongolia que certificó el establecimiento de una nueva conectividad energética mediante un colosal gasoducto (que va de Rusia a China, pasando por Mongolia) destinado a reemplazar las instalaciones gasísticas Stream 1 y 2, de Rusia con Alemania, unos gasoductos que como sabemos han sido torpedeados sistemáticamente por Estados Unidos.
Simultáneamente a la cumbre de Samarcanda, Rusia y China exhibieron su musculatura mediante sus segundos ejercicios navales conjuntos en el Pacífico – después de los espectaculares ejercicios militares Vostok 2022, efectuados del 1º al 7 de septiembre en el Mar de Japón.
A unos días de la Cumbre de Samarcanda, Occidente respondió con Ucrania que lanzó una contraofensiva en Izium /Járkov, obligando a un repliegue del ejército ruso que las multimedia occidentales han festejado como una “grave derrota de Putin”.
En el intertanto, la agencia Bloomberg, medio cercano a Biden, ha seguido fustigando a la dupla Putin /Xi por intentar crear un nuevo orden mundial que se prepara para contrarrestar el dominio unipolar de los Estados Unidos. Ante estos juicios el periódico Global Times respondió con un antiguo proverbio chino: “No le preguntes a un gorrión cómo vuela un águila”.
Algo está cambiando desde de la cumbre multipolar de Samarcanda. Los países que representan al menos el 30 por ciento de la economía mundial y el 40 por ciento de la población del planeta NO están dispuestos a soportar más un orden unipolar agónico en manos del eje anglosajón y un tambaleante Gran Reset globalista.